\v 5 Tus flechas son puntiagudas; los pueblos caen debajo de Ti; Tus flechas están en los corazones de los enemigos del rey. \v 6 Tu trono, Dios, es para siempre y siempre. Un cetro de justicia es el cetro de Tu reino. \v 7 Tú has amado la justicia y has odiado la maldad; por lo tanto, Dios, Tu Dios, Te ha ungido con el óleo de la alegría más que a Tus compañeros.