\v 10 Extiende tu pacto de fidelidad completamente para aquellos quienes te conocen, tu defensa para los rectos de corazón. \v 11 No dejes que el pie del hombre arrogante se acerque a mí. No dejes que la mano del malvado me ahuyente. \v 12 Allí los mavados han caído; ellos son derribados y no son capaces de levantarse.